Una de las cosas que he aprendido en estos años acompañando a mujeres hacia su empoderamiento, ha sido que el arquetipo de Afrodita es ideal para ayudarte a conciliar la confusión que te pueda causar el estar tan metida en tu papel como madre, que olvides que TAMBIÉN eres mujer, atractiva y sexy.
De hecho, éste es un clásico por el que las mujeres se acercan a este trabajo. Como ya sabes, mantengo que la Mitología contiene una fuente de sabiduría.
Vamos desde el principio:
Uno de los aspectos menos conocidos de Afrodita es el de madre. Afrodita tuvo una larga descendencia: Tiqué (Fortuna), Harmonia, Hermafrodito, Príapo, Himeneo, los gemelos Fobos y Deimos, entre ellos…y el más conocido de todos, Eros.
Por tanto, ¿te imaginas a la Diosa del Amor y de la Belleza, madre del Dios de la atracción sexual, perdiendo su sensualidad, su sex appeal? Yo no 
Desgraciadamente, estos dos roles se separaron a lo largo de la historia, generando frustración en muchas mujeres por la sensación de tener que elegir, causando esto a su vez otros problemas tanto internos como a nivel de pareja. Es algo que viene de forma ancestral, alimentado sobre todo por el patriarcado y la herencia judeo-cristiana, en la que las mujeres de la mitología suelen representar madres-mártires o “putas”, si es que eran sexualmente libres, tal como yo las veo.
Esto ha creado una sensación de desconexión con el propio cuerpo y la líbido, y sentimiento de culpabilidad, que al mismo tiempo afecta a la autoestima. Y si, incluso en estos tiempos. Me he encontrado mujeres jóvenes afectadas por este tema, siendo ellas mismas conscientes de lo que les estaba pasando.
¿Y qué hacer? ¿Cómo me ayuda el arquetipo de Afrodita?
Puedes hacer muchas cosas, y una de ellas es integrar a tu Afrodita para devolverte a tí misma el poder de ser madre y al mismo tiempo sentirte sexual.
Porque cuando hablo de poder, de integrar, etc. es porque doy por hecho que todo eso está en ti, todas estas Diosas de las que hablo en este blog. Siempre de dentro hacia fuera, recuerda 😉
Recupera tu parte juguetona, trabaja con tus sentidos (sensualidad), haz un esfuerzo en sacar esa Afrodita que llevas dentro. Quizá al principio cueste, pero tú sabes que es para tu bienestar, para mejorar tu autoestima, así que vale la pena.
Conecta con tu placer. Es algo que digo mucho últimamente, pero si supieras lo efectivo que es…¿sabes que la mayoría de nosotras hemos olvidado explorar qué es aquello que nos causa placer? Hablo del ámbito sexual y de la vida en si, pero reconectar con lo que te da placer a cualquier nivel te acerca a esa sensualidad que buscas.
Mímate, cuídate, ámate. Si, estás en tu papel de madre y cuidas muy bien de los demás, pero ¿y tú?
Éstas son algunas de las cosas que puedes hacer. Cuéntame cómo te va, me encanta leerte.
Te dejo aquí un vídeo de YouTube con un mini curso gratuito sobre el Arquetipo de la Amante.