Encontrar el objetivo vital es importante para el desarrollo personal, y para ello desarrollamos el enfoque. Pero parece que a los típicos factores que ya normalmente desvían nuestra atención, se ha añadido que parece que últimamente andan los tiempos revueltos. Quizá has apreciado a tu alrededor mucho movimiento general, y no siempre positivo.
Por ello, es muy importante que mantengas tu atención focalizada. Si te das cuenta, cuando desvías la atención de lo realmente importante a nivel interior (objetivos, deseos…), más te alejas de ellos y luego tienes esa sensación de tener que “volver a andar” el camino que ya habías hecho.
En este post te daré unos consejos muy sencillos, que imagino que conocerás, pero que en ocasiones va bien que te recuerden 😉
Y como sabes que me gusta hacerte propuestas de valor para propiciar tu crecimiento, hoy no será una excepción y te propongo que trabajes en ellos diariamente durante al menos 21 días…y si te apetece me cuentas como te va!
Allá va:
- No tomes las cosas de forma personal. Veo últimamente en redes sociales, YouTube, etc. que muchas personas opinan, y no siempre de forma educada ó racional. Esto puede “engancharte”, es decir, empiezas a darle vueltas y luego hay un montón de personas opinando desde un sentimiento de rabia, dolor, etc. No caigas en esto; lo que opine otra persona (y mucho menos en estos lugares) no debe afectarte de forma personal. Date cuenta que en muchas ocasiones son personas que ni siquiera conoces personalmente. Sé que a veces es inevitable tener un sentimiento de “injusticia” hacia otra persona o situación y deseemos justificar o defenderla. Sin embargo, esto provocará acabar en una espiral sin fin y sin llegar a nada (al menos nada que sea positivo y tangible). Por lo tanto, utiliza este sentimiento para transformarlo en esas ganas que tienes de cambiar el mundo desde el amor, o cambiarte a ti mism@ para mejor. Esto además, no te hará perder el tiempo. Tienes mejores cosas que hacer, como por ejemplo, trabajar en tus objetivos y deseos 😉
- Busca tus espacios de silencio. Da igual si meditas, vas a clase de yoga, corres, etc. La mente necesita un descanso. En esos momentos, aprovecha para sentirte presente (en tu cuerpo, en tu respiración…). Ello te “traerá a la Tierra”, es decir, en ocasiones estás tan preocupad@ en tus asuntos, en qué harás luego, en qué te pasó durante el día…que luego ni recuerdas si cerraste el coche o apagaste el fuego porque no estabas presente. Sin embargo, al no estarlo, nos perdemos muchas cosas. El obligarte cada día un momento a esta actividad, hace que poco a poco lo vayas incorporando a tu vida. Y quizá no estés en presencia durante todo el día, pero de vez en cuando te darás cuenta y trabajarás en ello.
- Haz listas. Por ejemplo, hazte una lista de todas las actividades que hagas en un día, o en una semana, todas. Luego piensa cuáles son útiles y cuáles no. En ocasiones hacemos cosas por “costumbre”, pero en realidad, no pasaría nada si las delegamos o las dejamos de hacer. Si, parece raro, pero…¿y si descubres que puedes liberar algo de tiempo? ¿y si descubres que hay muchas cosas de las que haces que no te acercan a la vida que quieres vivir y las puedes sustituir por otras que sí lo hagan? Pruébalo. Puede que te de reparo dejar de hacer cosas “que siempre has hecho”, por ello deberás ser muy sincer@ contigo y no tener miedo de dejar algo antiguo atrás. Algo nuevo y fresco le sustituirá.
Espero que pongas en marcha estos sencillos consejos. Si te apetece compartir conmigo tus resultados me encantará.